En 1984 Pedro Carretero funda Joquer, una pequeña empresa familiar española para la producción de sofás, butacas y elementos auxiliares de tapicería que, seis años más tarde, empieza a exportarse a diversos países de Europa. A partir de 1997 comienzan las colaboraciones con diseñadores externos hasta que, en 2012, el diseñador Mario Ruiz asume la dirección creativa de la marca estableciendo un antes y un después al trazar un nuevo rumbo estratégico y la construcción de una identidad muy sólida para Joquer a través del diseño de calidad. Durante todo este proceso de crecimiento y evolución, las raíces mediterráneas de Joquer permanecen intactas. La suma de modernidad y tradición artesana constituye la esencia que se transmite en cada uno de sus productos.